Opinión

6.Jul.2015 / 02:36 pm / Haga un comentario

Sentir Bolivariano

Por: Adán Chávez Frías

Este domingo conmemoramos 204 años de nuestra Declaración de Independencia. Hace más de dos siglos atrás, ocurrió un hecho histórico decisivo que cambiaría irreversiblemente nuestro destino como pueblo: fue proclamada nuestra independencia del gobierno español y surgió la Primera República.

Después del 19 de Abril de 1810, se había avanzado en el camino hacia nuestra liberación del yugo español: se reconocía el principio de la Soberanía Popular, se aceptaban las elecciones, existía un Congreso Nacional, se permitía la práctica del derecho a la libre asociación. Pero faltaba declarar la Independencia “de hecho y de derecho”. La prudencia de algunos, los temores de otros, apuntaban al retardo de esta decisión por la que insistían los compatriotas más decididos y de conciencia revolucionaria más clara.

La historia es testigo de la vehemente lucha que se libró en diferentes terrenos, desde la Sociedad Patriótica; la participación decidida de héroes de la Patria como Francisco de Miranda, el joven Simón Bolívar, José Félix Ribas, entre otros, para poder formalizar esa declaración de independencia.

Es memorable el discurso de Bolívar, el 3 de Julio de 1811: “Lo que queremos es que esa unión sea efectiva, para animarnos a la gloriosa empresa de nuestra libertad. Unirnos para reposar y dormir en los brazos de la apatía ayer fue mengua, hoy es una traición. Se discute en el Congreso Nacional lo que debería estar decidido. Y ¿qué dicen? Que debemos comenzar por una confederación. ¡Como si todos no estuviésemos confederados contra la tiranía extranjera! Que debemos atender a los resultados de la política de España. ¿Qué nos importa si España vende a Bonaparte sus esclavos, o que los conserve, si estamos resueltos a ser libres? Esas dudas son tristes efectos de las antiguas cadenas. ¡Que los grandes proyectos deben prepararse con calma!.. Trescientos años de calma, ¿no bastan?, ¿Se quieren otros trescientos todavía? La Junta Patriótica respeta, como debe, al Congreso de la Nación; pero el Congreso debe oír a la Junta Patriótica, centro de luces y de todos los intereses revolucionarios. Pongamos sin temor la piedra fundamental de la libertad suramericana. Vacilar es sucumbir”.

Dos días después, el 5 de Julio de 1811, el Presidente del Congreso, el barinés Juan Antonio Rodríguez Domínguez, diputado por Nutrias, hizo la moción: “Que habiendo llegado el tiempo más oportuno para tratar la cuestión independencia absoluta, se discutiera inmediatamente”. Se debatió y sancionó, entonces, el Acta de la Independencia de la Patria. Es decir, Venezuela comenzaba su existencia como Nación libre, soberana e independiente.

En aquel entonces, nacía la Patria libre que luego nos fue arrebatada por más de un siglo de guerras intestinas, dictaduras militares y la falsa democracia que instauró el puntofijismo, hasta el arribo de la Revolución Bolivariana que sostuvo, desde sus inicios, el propósito fundamental de iniciar un proceso de liberación nacional para cristalizar nuestra definitiva independencia: la consolidación del Proyecto Bolivariano, que fue truncado con la muerte física del Padre Libertador.

El espíritu de cambio, de ruptura con el pasado colonialista que alberga el 5 de julio, prevalece en la Venezuela Bolivariana y Chavista de hoy. Este es un pueblo que ha decidido ser definitivamente libre y así lo ha manifestado en estos 16 años de Revolución, bajo el liderazgo del Comandante Eterno Hugo Chávez, en los que hemos transitado difíciles momentos; enfrentado golpes y contragolpes; recibido la amenaza y el ataque constante de la contrarrevolución interna y externa, pero hemos salido victoriosos.

Le demostramos al mundo, que pese a la conspiración de la derecha fascista nacional e internacional, al terrorismo financiero y económico que nos aplican desde Washington, a la amenaza militarista desde el Pentágono, tenemos el sagrado deber de continuar edificando esta Patria como una tierra verdaderamente libre y soberana.

En estos momentos, seguimos en la lucha por la Independencia, hacia la concreción de nuestro Socialismo Bolivariano, Chavista, Cristiano y Antiimperialista, como único camino que nos hará libres para siempre.

Y justamente hoy, a 28 meses de la siembra de nuestro Gigante Eterno, el mejor homenaje que podemos rendirle, es seguir unidos y trabajando arduamente, como lo venimos haciendo, para dar cumplimiento a los objetivos del Plan de la Patria, a fin de convertir a Venezuela en una potencia soberana, independiente y socialista.

Honor y Gloria al Bravo Pueblo, que avanza indetenible hacia su definitiva independencia! ¡Bolivarianos, Chavistas, Socialistas, por Siempre!

Felicitaciones al pueblo en Armas

Este 5 de julio, Día de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), vaya nuestro saludo y reconocimiento a todos y todas las y los integrantes de nuestro componente militar. Podemos decir que hoy, soldados y soldadas, junto a la organización popular, son ese pueblo en armas que como aquel Ejército de Bolívar, nos hizo libres y soberanos.

Hoy más que nunca, exhortamos a la unidad absoluta del movimiento cívico militar, legado de Chávez, para terminar de consolidar la independencia definitiva de la Patria. A cerrar filas como un solo bloque, pueblo uniformado en armas y pueblo trabajador, para mantenernos firmes en la defensa, en el terreno que sea necesario, de la Paz, la Soberanía y los logros de la Revolución Bolivariana.

¡Viva Chávez!

¡Viva Maduro!

¡Viva la Revolución Bolivariana!

¡Independencia y Patria Socialista!

Fuente: Página oficial del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV)

 

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